jueves, 24 de noviembre de 2016


Creemos que es importante cambiar la manera de construir hacia un enfoque global que priorice el bienestar de las personas y el respeto al medioambiente sobre otros parámetros, que fomente las estrategias de diseño pasivas y recursos locales y que actúe como los sistemas cíclicos de la naturaleza en los que nada se pierde. 

Para generalizar estos criterios y hacerlos accesibles a todos, no sólo casos aislados, es preciso independizarnos del poder adquisitivo y apostar por la flexibilidad, con soluciones personalizadas y adaptadas a cada circunstancia concreta. En un mundo que se tiende a estandarizar, esta elección supone un camino más largo, porque requiere un estudio y conocimiento profundo de las necesidades y deseos, agentes que intervienen y recursos disponibles; donde cada decisión es fundamental.

Pero al igual que cuando paseamos por el campo los caminos más sinuosos nos ofrecen recompensas sensoriales, sorpresas, gratos encuentros...construir de otra manera también nos proporciona grandes ventajas en la mejora de nuestra calidad de vida y confort, así como en costes de mantenimiento y autonomía de las fuentes energéticas. Elegir como queremos vivir y hacerlo posible está en nuestras manos.

No hay comentarios: